-Puedo llamarte luego?-le dije.
Se me qedó mirando fijamente y despues entornó los ojos en una mueca de dolor. Tragó saliva.
+Creo qe ya hablamos muchas veces de esto, cariño. Seguimos siendo los
mismos, y ni las circustancias ni nosotros mismo hemos cambiado. No hay
nada qe hacer. Simplemente esto no debería haber pasado.- dijo ella.
Me había qerido engañar, pero no. Era verdad. Seguiamos siendo los mismo
y ella tenía razón. Era un estúpido soñador. No podría remediarlo.
No hay comentarios:
Publicar un comentario